pierre valls
Pierre Valls y Eugenio Merino
Suelo
Talavera de Puebla del Taller Taleteca 3,285 azulejos negros
Medidas variables, 2025
Pierre Valls y Eugenio Merino
Contador
Talavera de Puebla del Taller Taleteca 90 x 15 x 10 cm, 2025
Edición de 3 + 2 pa
Pierre Valls y Eugenio Merino
Tibor
Talavera de Puebla del Taller Taleteca 26 x 14 x 14 cm, 2025
Edición de 3 + 2 pa
Pierre Valls
Exit Glacier I-X
Fotografía digital
Impresión sobre papel Hahnemühle
35 x 35 cm / u, 2024
Esta serie de fotografías se observa el transito del artista en el campo de hielo de Harding en Alaska, allí se deriva el glaciar Exit que se encuentra en las montaña de Kenai. Durante su recorrido Pierre Valls advirtió la dicotomía de estar presente en la belleza del Parque Nacional de los Fiordos y ser testigo a la vez de la desaparición del glaciar, que según los datos ha ido retrocediendo varios centímetros en los últimos años. Este caso no es aislado, según las fuentes de información científica el calentamiento global esta provocando el deshielo de más del 49% de los glaciares en el mundo, el ejemplo más cercano es el del glaciar Ayoloco, ubicado en la cumbre del volcán Iztaccíhuatl, el cuál fue declarado como extinto en 2018. En este recorrido agridulce Pierre se confrontó con la primera tormenta del viaje, su cámara se estropeó por congelamiento, lo invadieron el miedo, el frío y la incertidumbre de la sobrevivencia, tres osos, una madre y sus dos crías acompañaron su camino, pensó inmediatamente en su madre. Es por ello que la voz que emergía desde su cabeza era la de Brigitte, con su melódico francés entablo un dialogo con ella, a kilómetros de distancia es aún su lugar seguro, su piso a tierra y en quien alberga sus más intimas esperanzas. El formato de las fotografías responde no sólo a esa necesidad de introspección, –¿recuerdan que su cámara se dañó?-, estas imágenes fueron tomadas desde el lente de su celular.
This series of photographs shows the artist’s transit through the Harding Ice Field in Alaska, where the Exit Glacier is derived, which is located in the Kenai Mountains. During his tour, Pierre Valls noticed the dichotomy of being present in the beauty of the Fjords National Park and at the same time witnessing the disappearance of the glacier, which according to data has been receding several centimeters in recent years. This case is not isolated, according to sources of scientific information, global warming is causing the melting of more than 49% of the glaciers in the world, the closest example is that of the Ayoloco glacier, located at the summit of the Iztaccíhuatl volcano, which was declared extinct in 2018. On this bittersweet journey Pierre was confronted with the first storm of the trip, his camera was damaged by freezing, fear, the cold and the uncertainty of survival invaded him, three bears, a mother and her two cubs accompanied his path, he thought immediately in his mother. That is why the voice that emerged from his head was that of Brigitte, with his melodic French he established a dialogue with her, kilometers away it is still his safe place, his ground floor and in whom he harbors his most intimate hopes. The format of the photographs responds not only to that need for introspection – do you remember that your camera was damaged? – these images were taken from the lens of your cell phone.
Pierre Valls
Cartel de Nome
Impresión sobre papel
70 x 56 cm, 2024
Fotografía realizada en la cumbre de la montaña Anvil –monte sagrado para los Iñupiaq–, allí se divisan los rastros de las estructuras de la White Alice Communications (WACs) system, instaladas por los militares norteamericanos a mediados de 1950. Para obtener esta imagen, Pierre permaneció acampando en la montaña durante una noche, desconociendo la relevancia para los Iñupiaq – dentro de sus creencias nadie puede habitar este territorios–. Las estructuras permanecen vulnerando ahí la cosmogonía del pueblo Iñupiac, como una invasión de hongos que lamentablemente son resistentes al paso del tiempo, así como el resto de signos del desarrollo que persisten en transgredir sus tierras.
Photograph taken at the summit of Anvil Mountain – a sacred mountain for the Iñupiaq – where you can see the traces of the structures of the White Alice Communications (WACs) system, installed by the North American military in the mid-1950s. To obtain this image, Pierre remained camping on the mountain for one night, unaware of the relevance for the Iñupiaq – within their beliefs no one can inhabit these territories. The structures remain there, violating the cosmogony of the Iñupiac people, like an invasion of fungi that unfortunately are resistant to the passage of time, as well as the rest of the signs of development that persist in transgressing their lands.
Pierre Valls
Radares
Impresión digital sobre papel
100 x 70 cm, 2024
Pierre Valls
Paisaje 1
(Salmon Lake, Peninsula de Bering, Alaska)
Acrilico sobre tela,
210 x 280 cm, 2024
Un volcán emerge del lago Salmon Lake o Nahwazuk en lengua Iñupiat. A través de su representación Valls intenta evocar la transición que le ha supuesto el tránsito de este viaje. El artista que generalmente se vincula con la pintura hiperrealista –aunque no se define como pintor–, deconstruye a través del color y la textura una percepción cuasi fotográfica: un cielo plano e inmutable, pequeños trazos pictóricos que se subyaponen como sistema constructivo en el que emerge el volcán, silencios que aluden al silencio de la niebla. Es esta una alegoría a una sensación vital, un ejercicio pictórico en que a través de la evasión de gestos y detalles, logró expresar la esencia; así su experiencia en esta travesía denominada Diomedes.
A volcano emerges from Salmon Lake or Nahwazuk in the Iñupiat language. Through his representation Valls tries to evoke the transition that this journey has brought him. The artist, who is generally linked to hyperrealist painting –although he does not define himself as a painter–, deconstructs through color and texture a quasi-photographic perception: a flat and immutable sky, small pictorial strokes that are superimposed as a constructive system in the one where the volcano emerges, silences that allude to the silence of the fog. This is an allegory of a vital sensation, a pictorial exercise in which, through the evasion of gestures and details, he managed to express the essence; thus his experience on this journey called Diomedes.
Pierre Valls
Beiring Strait
Grafito sobre papel Bond
0 x 0 cm, 2024
Este fragmento sonoro, grabado en el corazón del océano Ártico, captura un minuto de deshielo en forma de gotas que resuenan sobre el hielo fragmentado. La obra evoca un adiós ancestral, un susurro melancólico que parece emanar de las entrañas del planeta. Cada gota, al caer, compone una partitura efímera y frágil, una melodía que narra el desvanecimiento de un mundo helado, como lágrimas que el paisaje derrama en su desaparición. El sonido, tan sencillo como profundo, marca el pulso de un ecosistema en agonía, transformado irremediablemente por el cambio climático. La armonía natural de estas gotas contrasta con la tragedia que las envuelve, convirtiéndose en un llamado urgente a la reflexión. Es un canto del n, una melodía que invita a escuchar y reconocer la fragilidad de la Tierra. Este breve fragmento es una partitura del colapso, una pieza que resuena como el eco de un mundo que lucha por no desvanecerse.
This sound fragment, recorded in the heart of the Arctic Ocean, captures a minute of melting in the form of droplets that resonate on the fragmented ice. The work evokes an ancestral goodbye, a melancholic whisper that seems to emanate from the bowels of the planet. Each drop, as it falls, composes an ephemeral and fragile score, a melody that narrates the fading of a frozen world, like tears that the landscape sheds in its disappearance. The sound, as simple as it is profound, marks the pulse of an ecosystem in agony, irremediably transformed by climate change. The natural harmony of these drops contrasts with the tragedy that surrounds them, becoming an urgent call for reflection. It is a song of the n, a melody that invites us to listen and recognize the fragility of the Earth. This brief fragment is a score of collapse, a piece that resonates like the echo of a world that struggles not to fade away.
Pierre Valls
Fragmento: la melodia del deshielo ártico
Partitura, impresión sobre papel
50 x 40 cm, 2024
Pierre encontró estos fragmentos en Teller, Bering, Alaska. Estos trozos de bandera que se encontraban dispersos y raídos -algunos ya no dispuestos en esta plancha por su descomposición- en algún momento se ondearon orgullosamente demarcando un territorio del que jamás se ha responsabilizado. El viento le da vida a las banderas y las convierte en un caos, en este caso es un símbolo de la ironía, una imposición identitaria de un país del primer mundo en un territorio que no goza de ninguno de sus bene cios, un lugar olvidado por sus políticas, donde no existe infraestructura ni agua potable.
Pierre found these fragments in Teller, Bering, Alaska. These pieces of flag that were scattered and frayed – some no longer arranged on this plate due to their decomposition – were at some point flown proudly demarcating a territory for which they have never been responsible. The wind gives life to the flags and turns them into chaos, in this case it is a symbol of irony, an imposition of identity of a first world country in a territory that does not enjoy any of its benefits, a forgotten place due to their policies, where there is no infrastructure or drinking water.
Trozos de tela
Fragmentos de bandera norteamericana sobre base de cemento
94 x 145 cm, 2024
Pierre Valls
This is the end
Instalación (hielo, estructura de cemento, bandera)
Medidas variables, 2024
En esta cápsula que emula las cajas contenedoras que arriban a Alaska en buques cargueros se exponen tres cortos realizados con celular. 5 Minutos sobre la tierra, lmado en el mar de Chukotka, Estrecho de Bering y Gotas de agua en el Mar ártico. Exhiben la majestuosidad del territorio, el movimiento lento de los icebergs en una contradicción con la rapidez de su desaparición, su caminar pausado hacia las aguas contaminadas teñidas de color marrón, el sonido que emana del goteo persistente del deshielo; una partitura hipnótica que representa el n del mundo, pero que a pesar de ello su belleza inherente nos permite disfrutar como una na puesta en escena. El devenir de los tiempos tiene un goce poético que sólo es posible sentir a través del cuerpo.
In this capsule that emulates the container boxes that arrive in Alaska on cargo ships, three short films made with cell phones are exhibited. 5 Minutes above the earth, filmed in the Chukotka Sea, Bering Strait and Drops of water in the Arctic Sea. They exhibit the majesty of the territory, the slow movement of the icebergs in a contradiction with the speed of their disappearance, their slow walk towards the contaminated waters dyed brown, the sound that emanates from the persistent drip of the thaw; a hypnotic score that represents the end of the world, but despite this its inherent beauty allows us to enjoy it as a stage performance. The passing of time has a poetic joy that can only be felt through the body.
Pierre Valls
5 minutos sobre la tierra ( 5 min)
Gotas de agua (2 min)
This is the end (2 min)
Videos, edición de 3 + pa, 2024
Esta imagen da la bienvenida a la exploración Diomedes, la cual inicio en Nome, peninsula de Bering. Desde este punto se avistan tres carreteras que a pocos kilómetros se convierten en terracería, una experiencia premonitoria de lo que sería el viaje.
This image welcomes the Diomedes exploration, which began in Nome, Bering Peninsula. From this point you can see three roads that after a few kilometers become dirt roads, a premonitory experience of what the trip would be like.
Dulce emula el mapa de Sebastian Münster. Die Nüw Welt (Las nuevas islas), circa 1544. En el se observa por primera vez dentro de la cartografía que hace mención a “América”. En el se observa la congregación de lenguas europeas: italiano, latin y alemán, lo que in ere la participación de diferentes “expertos” en su elaboración, este a su vez describe gráficamente en la expedición de Magallanes, quien fallece en Filipinas antes de retornar a Europa. Los anteriores datos permiten dar razón de la particularidad del mapa, el cuál según supuestos fue elaborado a través de las narraciones de la mencionada expedición. Enfatiza en lo que ahora podríamos denominar Sudamerica dada la proximidad que tuvo el expedicionario a las tierras del sur, lo que in ere ligeramente en la coincidencia de su cartografía, el resto presenta inconsistencias notables a razón del desconocimiento de los territorios. En un lugar de ese lejano sur se puede leer “caníbales”, una percepción u mito que detonaría anticipadamente la estereotipación del “salvajismo” de los pueblos originarios. Es importante la relación de esta obra y del trabajo en general de Dulce Chacón con el realizado por Pierre Valls en Diomedes. Los mapas producto de expediciones, comisiones y viajes, aún son considerados el retrato veraz del territorio, en algunos de los casos son incluso secretos de Estado, en tanto, son empleados como material probatorio en controversias territoriales o delimitaciones marítimas, más sin embargo, ambas investigaciones nos permiten coincidir en que a pesar de la tecnología, hay muchos espacios aún sin explorar, que aquellas demarcaciones hemerográficas varian, son sujeto de cambios en este caso y en correlación por la acción e inacción del hombre. Que como todo son resultados de una producción antropogénica, y por ende contienen en ellas acciones y experiencias. En palabras de Dulce “el mundo se sigue abriendo como un libro”, Pierre ha logrado capturar en su trayecto el trámite de la experiencia para construir una cartografía, quizás no geográfica, si no propia, como animal social exponiendo para ello su cuerpo y su vulnerabilidad como ser vivo.
Dulce emulates Sebastian Münster’s map. Die Nüw Welt (The New Islands), circa 1544. In it it is observed for the first time within the cartography that mentions “America”. In it the congregation of European languages is observed: Italian, Latin and German, which implies the participation of different «experts» in its elaboration, this in turn graphically describes the expedition of Magellan, who died in the Philippines before return to Europe. The above data allow us to explain the particularity of the map, which according to assumptions was made through the narratives of the aforementioned expedition. It emphasizes what we could now call South America given the proximity that the expedition had to the southern lands, which slightly affects the coincidence of its cartography, the rest presents notable inconsistencies due to the lack of knowledge of the territories. In a place in that far south you can read “cannibals”, a perception or myth that would trigger in advance the stereotyping of the “savagery” of the native peoples.The relationship between this work and Dulce Chacón’s work in general with that carried out by Pierre Valls in Diomedes is important. Maps, the product of expeditions, commissions and trips, are still considered the true portrait of the territory, in some cases they are even state secrets, while they are used as evidentiary material in territorial disputes or maritime delimitations, however, both Research allows us to agree that despite technology, there are many spaces still unexplored, that those hemerographic demarcations vary, are subject to change in this case and in correlation due to the action and inaction of man. Which, like everything else, are results of anthropogenic production, and therefore contain actions and experiences in them. In Dulce’s words, “the world continues to open like a book,” Pierre has managed to capture the process of experience in his journey to build a cartography, perhaps not geographical, but his own, as a social animal, exposing his body and his vulnerability as a living being.