cien del MuAC
Con Cien del MUAC, el museo presenta su colección como un discurso múltiple, guiado no por una línea temática, sino por la relevancia que ciertas obras y autores tienen ya en nuestra conciencia del arte contemporáneo en México. De ahí que apostamos por proponerle al espectador un conjunto de obras que consideramos imprescindibles en la historia del arte reciente.
En su primera década, en medio de accidentes y dificultades, como la constante fluctuación de recursos y posibilidades, la colección del MUAC ha logrado consolidar una representación significativa de la producción artística en México. Este acervo incluye obras a partir de 1952, fecha marcada por el gesto modernizador de la construcción de Ciudad Universitaria, y, sobre todo, del periodo posterior al cimbramiento político, social y cultural de 1968.
Explorar una colección también implica revisar el canon y ser críticos ante sus sesgos históricos. Parte de las tareas esenciales de esta muestra es catalogar las obras según estándares internacionales para concretar, a mediano plazo, el anhelo de que estén disponible para su consulta pública en línea.
Cien del MUAC muestra una selección de obras clave de la colección artística y de la documental. Cada una de las piezas se consideró no por su orden generacional ni tampoco por una secuencia narrativa, sino porque aborda en sí misma una historia sobre la colección del museo.
Nuestra apuesta es que estas obras se conviertan en objeto de interés para investigadores y estudiantes, en referente de las batallas artísticas futuras de la región y que acompañen la existencia cotidiana de nuestros públicos.
Cien del MuAC
Museo de Arte Contemporaneo, UNAM
Con obra de César Martinez, Perla Krauze y Manuel Rocha Iturbide
12.06 – 10.10.2021
salas 1, 2, 3, 4, 5 y 6
César Martínez
Ciudad de México, 1962
El desgaste de la clase media en México o geografía de la devaluación transpiraba, 1999
Esculturas dinámicas. Hule látex,
mangueras y sacadoras de pelo
medidas variables
Adquisición, 1999
Tres figuras humanas se inflan v desinflan mediante un mecanismo que se activa con sensores de movimiento. Estos «sucesos escultóricos, como los ha llamado el artista, adquieren así una existencia temporal ,’funcionan sólo a partir de la presencia del espectador. Como en otras de sus obras antropomorfas, Martínez visibiliza la fragilidad también por los materiales que utiliza corno el látex o incluso elementos comestibles… Al mecanizar y retardar un proceso tan
automático imperceptible como la respiración, el artista pone énfasis en el papel del aire como sostén de la vida, así como en sus costos biológicos y económicos.
E. P.
Perla Krauze
Ciudad de México, 1953
Construcción #4, 2018
Instalación. Imprentas de grafito sobre tela, agua, lámina de plomo,
cemento, madera, hoja de oro y óleo
Medidas variables
Adquisición a través del programa Pago en Especie SHCP, 2017
Perla Krauze recorrió una multitud de talleres de piedra, renteras, ladrilleras, depósitos fósiles, salinas, manantiales y otros espacios del estado de Puebla, investigando las posibilidades plásticas de la industria de los pedreros y canteros de la región. Objetos principales de su fascinación fueron las piedras que los talleres usan corno base para hacer los cortes de mármoles y piedras
finas, que acaban cruzadas por las marcas de la sierra de diamante sugiriendo dibujos aleatorios. A partir de esas marcas, Krauze produce «improntas» consistentes en frotages de esas superficies que atrapan la memoria del trabajo artesanal. La serie Construcción es uno de los híbridos de escultura, pintura
y gabinete de coleccionista con que Kraure archiva sus trabajos
de exploración y recolección.
C M.
Manuel Rocha Iturbide
Ciudad de México, 1963
Ping Roll, 1997
Mesa de aluminio, 6 bocinas y 3 grabaciones de audio
76.3 x 192.5 x 92 cm
Donación del artista, 2015
Sobre una mesa descansan garlas pelotas de dng-pong y debajo de ella se encuentran seis bocinas distribuidas para cubrir toda el área. Al activar la pieza sonora, las vibraciones que producen el sonido y el Alencio emitidos por las bocinas generan saltos y movimiento en las pelotas originalmente estáticas.
Con esta instalación, Rocha presenta de manera tangible lúdica una paradoja cuántica vinculada con las dos cualidades de un electrón, ser una partícula que emite fotones discontinuos que al mismo tiempo se comporta como una onda. Esta escultura sonora, una de las primeras en su carrera, fue exhibida en la Bienal de Sídney en 1998.
A. D. C.
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